El Club de Fútbol Talavera de la Reina perdió en la noche de este pasado domingo 21 de agosto algo más que un mero partido de pretemporada. Y es que entre otras cosas se les fue la posibilidad de defender su título la Copa Castilla-La Mancha, la opción de avanzar dentro de la Fase Regional de la Copa RFEF y, por tanto, su opción de poder concursar esta temporada en la Copa del Rey.
Quizá fue el peor partido veraniego de los cerámicos, que hay que decir que no empezaron del todo mal buscando la meta de Manu Lucas con alguna que otra llegada clara, pero fue cumplirse el minuto 11 de encuentro y llegó el cortocircuito de los de Rubén Gala, quien concedieron el 1-0 después de una muy mala defensa, bastante adelantada y casi a la altura de la medular, que permitió a Josemi recibir, avanzar metros y batir en el mano a mano a Rabanillo.
Y no mejoraría la cosa en los minutos posteriores, ya que incluso iría a peor con dos llegadas claras no materializadas por el conjunto gallardo y una tercera en la que sí acertaron, aunque más por demérito visitante que por mérito local. Cedió Rubén Ramos hacia atrás a Rabanillo, éste que no llegó y la pelota le cayó a un Christian Fernández, ex del conjunto cerámico, que sólo y sin oposición de nadie empujó la bola para el 2-0.
Poco más tuvo este primer acto, tan sólo una acción fortuita en la que Dani Ramos y Aitor Rubio chocaron cabeza con cabeza y la cita tuvo que ser detenida varios minutos hasta la recuperación completa de ambos jugadores, quien pudieron continuar una contienda que, instantes después, se fue a su periodo de descanso.
En el segundo acto trató de mover piezas Rubén Gala dando entrada a Lass y Asier Etxaburu por Lolo Garrido y Javi Bueno. Mejoraron algo los visitantes, aunque casi reciben el 3-0 en un mano a mano en el que Rabanillo le ganó la partida a Aitor Rubio. A partir de ahí llegadas de los rosados, con ocasión clara para Álvaro Juan que se le iba alto y con un penalti cometido por Fane que le permitía a Renan Zanelli acortar distancias y poner el 2-1.
421 minutos después llegaba el primer gol talaverano y un rayo de esperanza se iluminaba pudiendo Asier Etxaburu lograr la igualada pero su remate se le iba alto. Parecía que querían los visitantes hasta que Lass se autoexpulsaba en el 73’ tras agredir a un contrario dejando a los de la Ciudad de la Cerámica con diez.
Y le pesó esa inferioridad al Talavera, que de aquí al final fue un quiero y no puedo ante un rival ordenado. Para colmo de males una nueva expulsión, esta vez de Loukou, dejaba a los de Talavera de la Reina con nueve jugadores sobre el terreno de juego y con una sensación de impotencia por ver cómo se escapaba este primer objetivo deportivo de la temporada.
